Page 147 - El impacto de la automatización y la IA en empleo del sector Agroalimentario español
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EL IMPACTO DE LA AUTOMATIZACIÓN Y LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN EL EMPLEO DEL SECTOR AGROALIMENTARIO ESPAÑOL
sindicatos, para garantizar una evaluación continua del impacto que la inteligencia
artificial tiene sobre las personas trabajadoras. Los sindicatos deben negociar la
inclusión de estas auditorías en los convenios colectivos, así como asegurar que los
resultados de estas evaluaciones sean transparentes y accesibles para las personas
trabajadoras.
En relación con el riesgo que existe en la sustitución o eliminación de puestos de
trabajo, deberían iniciarse negociaciones bilaterales entre los empleadores y los
representantes de las personas trabajadoras para que este último colectivo sea
incluido en la gestión del proceso de transición, priorizando aspectos como la
redistribución y la capacitación sobre la pérdida de empleos. En este sentido, la
Convención de Protección del Empleo de la OIT (No. 158, 1982) incluye
disposiciones sobre la finalización de empleos por razones tecnológicas. En línea
con recomendaciones similares, se deberían consultar a los representantes
sindicales en caso de despidos colectivos, minimizar los despidos y establecer
criterios de finalización y priorizar la recontratación. Conviene tener en cuenta
que, si bien tanto la automatización como la IA afectan al empleo tal y como
sugieren los resultados, en términos del número de empleos afectados la IA parece
tener un menor impacto que la automatización, previsiblemente porque el número
de ocupaciones afectadas es más reducido, ya que estamos hablando de una
tecnología de carácter más específico y con una difusión más reciente. En este
sentido, los sindicatos deberían desarrollar diferentes tipos de negociación
teniendo en cuenta la tecnología que utilice la empresa, ya que el impacto en
términos de empleo puede variar y, por tanto, requerir la formulación de
estrategias adaptativas en el ámbito de las relaciones laborales.
También las negociaciones deberían estar dirigidas hacia la reducción de la
jornada laboral. Este es un debate que se está manteniendo en la actualidad de
manera intensa, debido a una posible reducción de la jornada laboral a cuatro días
que, sin embargo, demandará una mayor productividad de la persona trabajadora.
Al mismo tiempo, esta reducción de la jornada laboral podría abordar retos clave
de carácter estructural para la economía española, tales como la caída de la fuerza
de trabajo y el reto de la sostenibilidad demográfica, materializada en un
progresivo envejecimiento poblacional. La automatización o la IA podrían sustituir
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