El sindicato considera que se trata de una propuesta abusiva después de que la empresa haya finalizado 2023 con beneficios tras los sacrificios que realizó la plantilla hace poco más de un año, así como la compra de sus instalaciones por parte de la ADER
La Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT y CCOO Industria han denunciado el intento de descuelgue del Convenio Colectivo de la Industria Química que plantea Sealing Systems Automotive (antigua Lispar) para sus 242 trabajadores, considerándolo "un abuso injustificable".
Para los sindicatos, se trata de una propuesta "fuera de lugar después de que la empresa haya finalizado 2023 con beneficios tras los sacrificios que ya realizó hace poco más de un año la plantilla, así como la compra de sus instalaciones por parte de la ADER". UGT FICA y CCOO Industria recuerdan que la multinacional llegó en octubre de 2022 a un acuerdo por el que prácticamente la mitad de la plantilla aceptó un descenso de sus categorías laborales (de nivel 3 a nivel 2) y con ella de sus salarios para evitar la marcha de la empresa a la planta de Mendavia.
Mientras, el Gobierno de La Rioja acordaba por su parte la compra de los pabellones para posteriormente arrendarlos a la empresa, con opción a compra. Unos movimientos que, según ambos sindicatos, han propiciado la buena marcha de la empresa, que ha concluido este ejercicio con beneficios. Y pese a ello, la empresa pretende ahora desmarcarse de la aplicación del convenio colectivo de Industrias Químicas y no aplicar las subidas salariales que legalmente corresponden a los trabajadores/as.
Concretamente, el convenio recoge una actualización de las tablas por el periodo 2021-2023 del 10,3 por ciento como resultado de la desviación sufrida y no percibida durante estos tres años; una actualización de salarios que no implica el cobro de atrasos sino únicamente su aplicación a partir de 2024. UGT FICA y CCOO Industria instan a la empresa a no abusar de la plantilla y asumir su obligación, especialmente después de haberse beneficiado de los sacrificios económicos de las trabajadoras y trabajadores. Ambas organizaciones consideran inadmisible esta nueva vuelta de tuerca de la empresa y advierten de que iniciarán movilizaciones si no cambia radicalmente su postura.