La asamblea conjunta celebrada ayer por UGT FICA y CCOO insta a la patronal a sentarse a negociar un convenio digno que tenga en cuenta el escenario económico actual

 La negociación del Convenio del Comercio Metal de Madrid sigue enquistada. Cuando ha transcurrido un año desde el inicio de las negociaciones, los avances para la renovación del convenio están siendo mínimos por la negativa de la patronal a reconocer el momento tan difícil que están atravesando las y los trabajadores al negarse a mantener el poder adquisitivo de este año y de los siguientes, y proponer un incremento salarial para 2022 muy por debajo de la actual inflación. Y para los años posteriores su propuesta limitar a un 4% en dos años la revalorización al IPC. 

Las reivindicaciones de la representación sindical, puestas de manifiesto en la asamblea conjunta celebrada ayer, pasan por el mantenimiento del poder adquisitivo, la reducción de jornada, la articulación de medidas en materia de teletrabajo, el reconocimiento de permisos retribuidos tal y como reflejan otros convenios sectoriales, y la adecuación de medidas relacionas con los avances legislativos en materia de igualdad, lactancia y LGTBI, que la representación empresarial también se niega a incluir en el convenio colectivo.

Es por ello, que UGT FICA Madrid y CCOO reclaman a la patronal que se siente a negociar un convenio digno, adaptado al siglo XXI y la legislación vigente y un incremento salarial acorde con la subida de los precios. En caso de no producirse avances en los próximos días, ambas organizaciones sindicales convocarán movilizaciones en defensa de los derechos y condiciones laborales de los trabajadores y trabajadoras del sector.

Por parte de UGT FICA Madrid, en la asamblea de ayer participaron su secretario general, Juan Antonnio Lorido, y la secretaria de Acción  Sindical, Patricia Ruiz.