La Federación de Industria, Construcción y Agro UGT en la fábrica de Equipos Nucleares (ENSA) en Maliaño ha exigido hoy que la empresa pública abone los salarios del convenio colectivo del sector siderometalúrgico de Cantabria a casi una tercera parte de su plantilla (170 de 540 trabajadores) con remuneraciones por debajo de las sectoriales.
El sindicato agrega que, tras casi 20 meses de negociación del nuevo convenio colectivo de la empresa pública, Equipos Nucleares no paga el límite salarial mínimo sectorial e “incluso propone ahora un convenio que llevaría consigo el descuelgue salarial del convenio del metal, lo que provocaría que los trabajadores y trabajadoras de ENSA serían los peor pagados de todas las empresas del sector siderometalúrgico de Cantabria”.
UGT FICA señala que la empresa pública, participada por la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales), justifica su negativa a pagar como mínimo los salarios del sector siderometalúrgico por la Ley de Presupuestos Generales del Estado “cuando entendemos que es algo a lo que está obligada cualquier empresa, sea pública o privada, según las propias directrices marcadas por el Gobierno español en materia de salarios”.
“No es admisible que ENSA devalúe su convenio propio respecto al sectorial y rechace una y otra vez pagar los salarios que corresponden a peones especialistas y titulados medios y superiores, proponga un convenio desvinculado al de sector y, además, condicionado a la ejecución del Plan Estratégico que tienen sobre la mesa”, critica el sindicato. En un comunicado, UGT FICA considera “un sinsentido” que “ENSA invierta en un plan estratégico vital para el futuro y haga imposible a la vez retener el talento y mucho menos atraerlo con los salarios que está ofreciendo en la actualidad; y más, si se tiene en cuenta que es una empresa de alta capacitación que trabaja con los más altos estándares de calidad en la fabricación de componentes nucleares, únicamente comparables a los del sector aeroespacial”.