En defensa del futuro del empleo y de inversiones que aseguren el futuro de la fábrica
La plantilla de Saint Gobain se ha concentrado esta mañana delante del ayuntamiento de Castrillón en un acto más de las movilizaciones que mantiene contra el cierre de la división de fabricación de parabrisas (Sekurit) que afecta a 160 trabajadores, y en defensa del empleo y de inversiones que aseguren el futuro del conjunto de la planta avilesina.
Y es que los trabajadores de Saint Gobain no se juegan solo el cierre de su división de fabricación de parabrisas, sino "el futuro de todo el complejo industrial", en palabras del secretario general del SOMA-FITAG UGT, José Luis Alperi, para quien si no hay un plan de inversiones, al cese de la actividad de Sekurit se le uniría otro frente en dos o tres años y entonces "estaríamos hablando de que no habrá Saint Gobain en Avilés".
Es por ello que las movilizaciones van dirigidas tanto a asegurar una salida no traumática para la plantilla de Sekurit como para exigir un plan de inversiones que garantice la viabilidad de la fábrica de Avilés para los próximos años, lo que pasa, necesariamente, por asegurar la continuidad del horno “que es el corazón de la fábrica”, lo que requiere de una inversión importante.
Para Alperi, lo que la multinacional francesa pretende es una deslocalización de la actividad hacia Rumanía, Polonia o Marruecos, países en los que se van a seguir fabricando parabrisas.