En su intervención, Mariano Hoya ha puesto en valor la celebración de este tipo de jornadas, que vienen a poner en común, orientar y colocar en el centro del debate las principales reivindicaciones de la Federación que luego se trasladan a las mesas de negociación en el ámbito de los sectores de UGT FICA para dar solución a los problemas que se presentan en el día a día de los centros de trabajo.
Entre estas reivindicaciones, Mariano Hoya ha vuelto a situar la reducción del tiempo de trabajo como una de las reivindicaciones irrenunciables del Sindicato, un objetivo que, lamentablemente, no ha sido posible llevar a cabo a través de la negociación colectiva por la negativa sistemática de las patronales a negociarla en los convenios. A este respecto, ha recordado un reciente estudio elaborado por UGT FICA sobre la evolución del tiempo de trabajo en el sector metal en el que se concluye que, de los 54 convenios provinciales del sector, la jornada laboral se ha reducido en tan solo una hora en el periodo de 2012 a 2022, "una hora en diez años", ha insistido.
La razón de esta escasa reducción está en el lado de las patronales y los empresarios, que han venido bloqueando sistemáticamente cualquier tiempo de reducir el tiempo de trabajo cada vez que se ha planteado. Lo irónico es que es ahora sí parecen dispuestos a sentarse a negociar. Justo cuando se anuncia que el Gobierno pretende legislar sobre la jornada es cuando nos llaman para negociar. Pero llegan tarde. Desde UGT FICA siempre estamos dispuestos a negociar, siempre, pero no a cambio de. Por eso "estamos a favor de que legisle el Gobierno, y que legisle bien".
"Vamos a estar atentos y a presionar para culminar en la 32 horas" por muchos factores positivos. Entre estos factores está el proceso de transformación que están viviendo especialmente la industria pero que afecta al conjunto del país, como son la digitalización, la robotización y la electrificación, que ya están afectado al nivel de empleo nos van a llevar en los próximos años a importantes pérdidas de empleo. La OIT cifra en 56 millones la pérdida de empleo en el mundo, sobre todo industrial, y en 24 millones los puestos de trabajo que se van a crear relacionados con los servicios a la industria. Luego, aunque solo sea por una cuestión de aritmética, hay que repartir el trabajo existente sin pérdida de retribució y de forma justa y ordenada, formando a los trabajadores en las nuevas tecnologías y recualificando a quienes puedan verse afectado por la pérdida de empleo para encontrar nuevos nichos de empleo. De esta forma, repartiendo el trabajo, "seguramente seremos un país más competitivo, más ecológico y seguramente un país donde hombres y mujeres podremos conciliar mejor nuestra vida familiar", ha señalado.
En este contexto ha rechazado los argumentos utilizados como "moneda de cambio" frente a la reducción de la jornada que comienzan a esgrimir algunos empresarios, como son la supuesta pérdida de competitividad de nuestros sectores y el incremento del absentismo, dos variables que se mantienen similares a las de otros países. "La productividad sigue creciendo y el absentismo se mantiene, no crece más. Por tanto, no vamos a caer en esas excusas".
El secretario general de UGT FICA ha puesto en valor el V Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva, que está ayudando a prolongar y afianzar los efectos de la reforma laboral e impulsando la negociación colectiva, la recuperación de los salarios y el mantenimiento del poder adquisitivo desde una posición de equilibrio en las mesas de negociación que se había perdido con la reforma laboral del PP.
Ha subrayado que nos encontramos en un contexto económico positivo, con un crecimiento en 2023 y unas previsiones para este año por encima de la media europea, por lo que en nuestras plataformas reivindicativas "vamos a seguir reclamando el crecimiento y la recuperación de la capacidad adquisitiva de los trabajadores y las trabajadores. Nuestro objetivo para este año se centra en no perder capacidad de compra", ha insistido.
Sobre la falta de seguridad en los centros de trabajo, ha lamentado el escenario insoportable que supone las 721 personas fallecidas el año pasado, un drama ante el que UGT FICA ya ha alertado que va a movilizarse ante unas cifras de accidentes y de fallecimientos "inaceptables". Lamentablemente, estos accidentes se producen sobre todo en los centros de trabajo en los que no existe representación sindical y donde no hay una organización que exija el cumplimiento de las medidas de seguridad que llevamos en nuestra plataformas.
Sobre el coste del despido ha considerado necesario abrir el debate sobre el bajo coste del despido en España, uno de los aspectos que quedaron pendientes de modificar de la reforma laboral del PP, y en concreto del despido improcedente sin causa, que anteriormente tenía una indemnización de 45 días por año trabajado con un tope de 42 mensualidades, y hoy en día es de 33 días por año con tope de 24 mensualidades. Mariano Hoya ha recordado que UGT presentó en mayo de 2022 una demanda contra el Gobierno de España ante el Comité Europeo de Derechos Sociales porque la actual regulación de la extinción del contrato española vulnera la Carta Social Europea y el Convenio 158 de la OIT, cuya resolución se está demorando en el tiempo y finalmente nos dará la razón y, a partir de ahí, se tendrá que analizar cada despido porque no estos no son iguales ni tienen las mismas consecuencias sociales, económicas y familiares.
En esta línea, ha abogado por seguir promoviendo la igualdad en el empleo entre hombres y mujeres ya que, pese a la aprobación de la ley de planes de igualdad y registro retributivo, es necesaria su implantación real.