La Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT está ultimando un documento sobre política industrial, fruto del consenso de todas sus organismos, con la finalidad de que pueda ser incorporado a la futura Ley de Industria y ofrezca una visión más social de la misma que proteja tanto los intereses de los sectores estratégicos del país como los de las personas trabajadoras en un contexto de transformación acelerada de la industria mundial. El documento, que UGT FICA pretende debatir y consensuar con CCOO, busca dar respuesta a los numerosos cambios habidos desde 1992, año en que fue aprobada la ley vigente, y tenga en cuenta los retos que se avecinan en los próximos años relacionados con la descarbonización y la digitalización de la economía mundial.
Se trata de un documento ambicioso y "potente" para encarar los desafíos a los que se enfrenta la industria electrointensiva, la del azulejo, la del automóvil, el sector químico, el energético, el aeronáutico, el naval, el siderúrgico, etc., a través de propuestas dirigidas a fortalecer y consolidar nuestra industria y facilitar por ley instrumentos para que el estado pueda defender los intereses del país e intervenir en sectores estratégicos en circunstancias extraordinarias. "Necesitamos una ley de industria que también sea protectora de los intereses del país", ha reclamado el secretario general de UGT FICA, Mariano Hoya, "tal y como están haciendo países como Alemania, Francia o Italia", que cuentan con los instrumentos legislativos necesarios para proteger sus intereses en momentos puntuales de las grandes multinacionales.
En su intervención en la reunión de hoy Mariano Hoya ha insistido en que "tenemos que ser capaces de que en la ejecución de los fondos europeos se incorpore la visión socio laboral, y no solo la económica". "No queremos ser convidados de piedra", ha insistido Mariano Hoya, "queremos aportar nuestra visión social en todo este proceso transformador, queremos que se nos escuche".