La Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT Castilla La Mancha rechaza rotundamente al ERE presentado esta semana por la dirección de la empresa Pablosky, localizada en la localidad toledana de Fuensalida, en la que trabajan un total de 314 personas.
El sindicato considera inaceptable la propuesta inicial de despedir a 48 personas, alrededor del 15% de la plantilla, y asegura que adoptará todas las medidas de presión necesarias -incluidos paros parciales y convocatoria de huelga- para revertir la decisión de la empresa.
Las próximas reuniones tendrán lugar los días 5, 11 y 20 de diciembre. En ellas UGT FICA CLM va a defender que, de producirse salidas, estas no sean traumáticas y se realizen a través de bajas voluntarias y con las mejores condiciones posibles.
La representante de la Sección Sindical de UGT en Pablosky, Lola Aceituno, señala que en la fábrica de Fuensalida trabajan familias enteras y que el ERE responde únicamente a la intención de la dirección de deslocalizar la producción y llevársela a Marruecos.
“No vamos a permitir que haya despidos y que con este ERE se de un nuevo mazazo a la comarca de Fuensalida, cuyas empresas de calzado se encuentran en una situación muy complicada", advierte Lola Aceituno. "Pablosky ha planteado ahora un ERE pero lo cierto es que en otras empresas del sector también se vienen produciendo despidos”, insiste.