El secretario general de UGT FICA, Mariano Hoya, ha señalado hoy en Palma de Mallorca que, independientemente de lo que ocurra a nivel político, desde el movimiento sindical "vamos a seguir apostando por consolidar y ampliar los avances sociales y civiles que impulsamos durante la pasada legislatura".
Mariano Hoya, que ha intervenido en una asamblea junto a la secretaria general de UGT FICA Islas Baleares, Sonia Saavedra, ha insistido en que desde el Sindicato vamos a seguir reivindicando, entre otros aspectos, un modelo productivo sostenible para una transición justa, verde y digital, el empleo estable y de calidad, un SMI que se mantenga en el 60% del salario medio, y un estatuto del siglo XXI que avance en derechos y aborde los nuevos retos a los que se enfrenta el mundo del trabajo.
Con relación a la propuesta de PSOE y SUMAR de reducir el tiempo de trabajo, Mariano Hoya ha subrayado que la propuesta, además de reconocer el papel institucional de los sindicatos y la realidad económica española como país con mayoría de pymes, debe hacerse a través de una ley, que debería complementarse a través de la negociación colectiva avanzando en la distribución de la jornada y aplicándola en los convenios colectivos. "En UGT llevamos tiempo exigiendo una necesaria reducción de la jornada de trabajo hasta alcanzar las 32 horas", ha recordado, ya que la reducción "no solo permitirá la creación de empleo, sino que tendrá beneficios para la salud, mejorará la conciliación, enriquecerá la vida social y contribuirá a generar impacto positivo sobre cuestiones relativas al entorno de trabajo y la productividad".
Sobre la situación de la industria, ha insistido en la necesidad de retomar el camino abierto en la pasada legislatura para consolidar una apuesta de futuro a través de la industria, aprovechando los fondos europeos para acometer nuevos avances aprovechando la inercia de los procesos de descarbonización y digitalización, pero en base a más y mejores derechos laborales y sociales.
En esta línea, ha situado la necesidad de alcanzar grandes consensos en clave de país. "Debemos reclamarlos a toda la clase política, especialmente en ciertos temas esenciales para el bienestar futuro de nuestra sociedad, que puedan convertirse en Pactos de Estado, una fórmula que puede dar continuidad a las políticas públicas más allá de los mandatos, dotándolas de estabilidad y poniéndolas al resguardo de los vaivenes políticos. Entre estos grandes pactos, ha mencionado el Pacto de Estado por la Industria, un gran acuerdo sobre el que construir un modelo productivo que, al igual que la Ley de Industria, se quedó en el tintero en la pasada legislatura, y con los que se debe garantizar una política industrial que arrastre al resto de sectores, que desarrolle la innovación y genere en abundancia empleo de calidad, bien remunerado y con derechos, así como una transición justa para todas las y los trabajadores.
En su intervención, ha reconocido que Baleares es una de las comunidades autónomas con menor presencia industrial debido a la predominancia del sector Servicios, fundamentalmente por la potencia del turismo y de su industria auxiliar en las islas, y también por la limitada disposición de recursos naturales. De hecho, el peso de la Industria en relación al total de la producción de la economía balear se sitúa en torno al 6,6%, muy por debajo de la media estatal. 
Por ello, ha puesto de manifiesto la importancia del Plan Estratégico Industrial 2017-2025 puesto en marcha por el anterior gobierno balear, para potenciar el desarrollo de la actividad industrial en las islas, aumentando la productividad, competitividad y calidad industriales, y contribuir a la creación de un modelo económico basado en el crecimiento sostenible y la creación de puestos de trabajo de calidad, con el objetivo de incrementar el peso de la industria sobre el PIB de las Islas Baleares en un plazo de diez años.