Ante un pabellón de la Feria de Cornellá abarrotado con más de 1700 afiliados y afiliadas de la Federación, el secretario general de UGT FICA, Mariano Hoya, ha dibujado un escenario difícil y complejo para 2023 en lo que se refiere a la negociación colectiva, y ello por la negativa de CEOE y CEPYME a renovar el Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva, cuya firma propiciaría un contexto óptimo, especialmente para dar cobertura a aquellos convenios en los que la presencia sindical es menor y son susceptibles de mantenerse bloqueados por la presión empresarial.
Sin embargo, la patronal española, una vez más, ni está ni se la espera cuando se la necesita para conseguir avances mientras las empresas siguen aprovechándose del escenario inflacionista actual para elevar su rentabilidad y sus márgenes.
Por ello ha reiterado el compromiso de la Federación y de la UGT de garantizar que ningún trabajador o trabajadora se quede atrás, por lo que no queda otra opción que plantar batalla a la patronal y a la avaricia empresarial para impedir que sean las y los trabajadores los que carguen con la crisis a través de la pérdida de su poder adquisitivo.
A este respecto, ha llamado a la Organización a mantenerse firme en nuestros objetivos de garantizar el poder adquisitivo de los salarios, incluir cláusulas de garantía salarial, e incorporar la reforma laboral a los convenios, así como los avances en materia de Igualdad, añadiendo a nuestras reivindicaciones una perspectiva de género, para que la transición, aparte de justa y verde, también sea feminista.
"Va a haber cláusula de revisión salarial en todos los convenios porque UGT FICA lo va a luchar. Y si no llegamos a un acuerdo de negociación colectiva, vamos a ir al conflicto", ha asegurado.
En este contexto, ha recordado que la negociación colectiva nos viene demostrando desde 2022 que, en las empresas con fuerte presencia sindical, se consigue subir salarios porque se puede presentar más batalla, de ahí la importancia de que la Federación se movilice colectivamente apoyando a los compañeros y compañeras en empresas que se nieguen a negociar, sobre todo de las pequeñas o donde el nivel de sindicalización es menor.
Ha insistido en la necesidad de centrar las negociaciones con las patronales en el ámbito salarial para, una vez alcanzado un acuerdo satisfactorio en este ámbito, avanzar en el resto de materias laborales, por lo que ha pedido concentrar ahora los esfuerzos negociadores en la subida salarial.
Retos sindicales
El secretario general de UGT FICA, se ha referido también a los retos sindicales a los que se enfrenta la Federación como consecuencia de los procesos de digitalización y descarbonización de la economía que ya están en marcha y están repercutiendo en la economía y en industria de nuestro país.
Ante procesos de transformación económica como los actuales, necesitamos herramientas eficaces y consensuadas para que no sea un algoritmo diseñado por una empresa quien decida quién se va y a quién se contrata. Exigimos una ley que regule el uso de estos instrumentos de gestión y obligue a las empresas a negociar con los sindicatos todos los factores que influyen en cada decisión.
Ha señalado que, de acuerdo con los estudios que manejan los expertos, la digitalización y la descarbonización pueden afectar, de una u otra forma, al empleo de entre el 20% y el 25% de los trabajadores y trabajadoras españoles, para los que ha reclamado soluciones negociadas ya que UGT FICA, no va a permitir que nadie pueda quedar atrás. "Para que la transición sea realmente justa hay que buscar soluciones y estar preparados para afrontar las consecuencias de estos procesos en sectores como el del automóvil, el químico, el energético o el agroalimentario, que se van a ver afectados por cambios importantes".
Mariano Hoya ha insistido en que la UGT tiene propuestas para que esta transformación incida en menor escala a nivel laboral. Entre estas, ha señalado la implantación de la jornada laboral de 32 horas semanales sin pérdida de derechos, una experiencia que ya se está llevando a cabo en algunas empresas y comunidades autónomas. Mariano Hoya ha insistido en la necesidad de avanzar y modernizar el reparto del tiempo de trabajo, ya que la implantación de las 8 horas laborales se consiguió hace más de cien años, y desde entonces se ha avanzado poco en este sentido.