Las movilizaciones de agricultores y los ganaderos de los últimos días han puesto en el disparadero un problema que, aun no siendo nuevo ni exclusivo de quienes lo protagonizan, viene agudizándose en los últimos meses y afecta al conjunto de la cadena alimentaria, de la que también forma parte la industria de la alimentación y las bebidas y sus trabajadores.
Desde UGT FICA venimos denunciando desde hace más de una década en todos los foros en los que participamos la necesidad de que el conjunto de la cadena alimentaria acometa reformas legales dirigidas a facilitar la competitividad del sector, dignificar las condiciones laborales de sus trabajadores, y dotarlo de unas relaciones laborales acordes con los tiempos actuales.
“Las trabajadoras y trabajadores de la industria de la alimentación y de las bebidas en España, al igual que los trabajadores y trabajadoras agrarios, también están sufriendo la presión de los bajos precios de los alimentos”, afirma el secretario sectorial de Alimentación, Bebidas y Tabacos de UGT FICA, Sebastián Serena. Estas presiones se traducen fundamentalmente en bajos salarios, nulas mejoras de sus condiciones de trabajo y en la exigencias de jornadas laborales a disposición de las empresas transformadoras de alimentos y bebidas.
Desde UGT FICA valoramos la iniciativa del Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, de constituir una Mesa de Diálogo Social con las organizaciones agrarias, y que a la misma se sumen las grandes distribuidoras de alimentos y bebidas instaladas en nuestro país. Sin embargo, consideramos que esta mesa de diálogo va a nacer coja si se excluye a los representantes de las trabajadoras y trabajadores agrarios y a los de la industria de la alimentación y las bebidas.
Nuestra reivindicación no es baladí. El Sindicato ya participó en los debates de la Ley 12/2013, de 2 de agosto, de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, aportando nuestras iniciativas y ofreciendo nuestras opiniones. En su momento advertimos de que, aun siendo positiva, esta ley era insuficiente para dar solución a los problemas de la industria agroalimentaria española y que, a nuestro juicio, la relación entre productores, transformadores y distribuidores seguiría siendo limitada e injusta. El tiempo, lamentablemente, nos ha dado la razón.
Para Sebastián Serena los trabajadores y trabajadoras de la industria de la alimentación y las bebidas española, “se niegan a seguir siendo el jamón y el queso del sándwich que representan los productores/industria y distribuidores.” La presión que se ejerce sobre los trabajadores “es insostenible y, como consecuencia de ello, cada vez resulta más difícil encontrar personas que quieran trabajar en esta industria agroalimentaria”.
Por todo ello, el sector de Alimentación, Bebidas y Tabacos de UGT FICA exige formar parte de cualquier mesa en la que se afronte el futuro de la cadena alimentaria al objeto de poder corregir las anomalías y situaciones injustas que se producen en la cadena alimentaria. A este respecto, desde UGT FICA vamos a solicitar formalmente en próximas fechas al Ministro de Agricultura la presencia de nuestra Federación en la Mesa de Diálogo Social con la finalidad de que los trabajadores y trabajadoras del sector tengan la visibilidad que ya ostentan y puedan participar en la adopción de las propuestas y medidas dirigidas a mejorar la cadena alimentaria.