El secretario del sector de la Industria Automovilística de UGT FICA, Jordi Carmona, ha advertido hoy que el sindicato no va aceptar que las patronales y las empresas del sector del automóvil intenten imponer de forma unilateral rebajas laborales a las plantillas escudándose en la crisis que atraviesa actualmente el sector y acometer medidas contrarias a los intereses de los trabajadores y las trabajadoras.

Jordi Carmona recuerda que las plantillas de la industria automovilística llevan meses acusando los efectos negativos de las sucesivas crisis que viene atravesando la industria automovilística (transición hacia el vehículo ecológico, pandemia, escasez de semiconductores, inflación desorbitada y encarecimiento del precio de la energía como consecuencia de la invasión de Ucrania) y que las únicas recetas que plantean las patronales y las empresas en las mesas de negociación son rebajas laborales e incumplimiento de los compromisos acordados con los representantes de los trabajadores, compromisos que, en la mayoría de los casos, iban ya acompañados de reducciones pactadas y de mayor flexibilidad.

“No vamos a aceptar que la crisis del automóvil la paguen los mismos de siempre”, alerta Jordi Carmona, para quien “la negociación es la herramienta de equilibrio entre las partes para alcanzar acuerdos en un escenario determinado”, por lo que “si una de las partes rompe ese equilibrio o adopta medidas unilaterales contrarias a los intereses de la otra parte, deja a esta última el camino libre para actuar como estime oportuno en la defensa de los derechos de sus representados”.

Para el secretario del sector de la Industria Automovilística de UGT FICA “intentar aprovechar el actual escenario para que el coste de la crisis lo paguen exclusivamente los trabajadores y trabajadoras es una estrategia de filibusterismo que no estamos dispuestos a consentir y a la que vamos a oponernos con todas nuestra fuerzas”.

“Desde UGT FICA somos conscientes de las dificultades actuales de las empresas fabricantes, de las empresas auxiliares, de los talleres y de los concesionarios del automóvil, y por ello estamos dispuestos a sentarnos en las mesas de negociación en el marco del diálogo social para abordar situaciones reales, planes a corto plazo y proyectos de futuro” señala Jordi Carmona, quien insiste, “nadie quiere pegarse un tiro en el pie”, pero “cumplir los acuerdos firmados, hacer frente a los incrementos salariales y mejorar las condiciones laborales son conceptos claves para el progreso y futuro de las empresas”, pese a que algunos empresarios “pretenden imponer unilateralmente rebajas laborales aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid”, concluye.