El secretario general de UGT FICA sitúa la nueva política industrial, la puesta en marcha de los coeficientes reductores de jubilación para las personas trabajadoras de la construcción, y la negociación colectiva en sus sectores entre los principales desafíos de la Federación
Mariano Hoya ha intervenido hoy en una de las mesas de debate de las jornadas confederales de Acción Sindical sobre "Negociación Colectiva y Diálogo Social: 40 años de la Ley de Libertad Sindical. UGT a la vanguardia del cambio", concretamente en la dedicada a analizar los "Nuevos retos sindicales", junto al secretario general de FeSMC, Antonio Oviedo y la secretaria geneal de FeSP, Isabel Araque y con la secretaria de Salud Laboral de UGT, Patricia Ruiz, como moderadora.
En su intervención, el secretario general de UGT FICA ha criticado que la situación de nuestra industria continúa estancada, y que a pesar del importante esfuerzo realizado gracias a los fondos NextGeneration, esta sigue adoleciendo de un bajo nivel de consumo industrial de bienes de equipo y maquinaria, un elevado coste energético, bajas tasas de inversión en I+D+i, y un desajuste con el sector educativo. Por ello ha vuelto a reclamar la aprobación de una vez por todas de la Ley de Industria y Autonomía Energética que, a estas alturas de año, todavía no ha iniciado su periplo parlamentario, pese a suponer una oportunidad para modernizar el marco legislativo, atraer inversión y fortalecer la autonomía estratégica de España mediante proyectos tractores que refuercen el sector industrial, haciéndolo más competitivo y sostenible. Al mismo tiempo ha hecho un llamamiento a la responsabilidad y vamos más allá insistiendo en la necesidad de un Pacto de Estado por la Industria, con objetivos a largo plazo que tengan validez y continuidad independientemente del color del partido en el Gobierno.
En esta línea, ha situado la solicitud llevada a cabo por UGT FICA para iniciar del procedimiento para determinar la anticipación de la edad de jubilación para los trabajadores de obra del Sector de la Construcción, una solicitud justificada por la elevada siniestralidad y mortalidad que sufre el sector y que justifica la aplicación de coeficientes reductores para asegurar una salida justa y anticipada para miles de profesionales expuestos diariamente a riesgos y condiciones severas. Precisamente la exigencia de los coeficientes reductores fue una de las razones de la movilización multitudinaria del pasado 16 de octubre frente a la sede la patronal CEOE.
La marcha de la negociación colectiva en los sectores del ámbito de la Federación constituye otro de los retos de UGT FICA. A este respecto, Mariano Hoya ha recordado que la Federación negocia un total de 39 convenio estatales, 450 convenios autonómicos y provinciales, y 738 convenios de empresa, dando cobertura a más de siete millones de personas trabajadoras del ámbito de sus sectores.
El secretario general de UGT FICA se ha detenido a analizar la situación de algunos convenios estatales, como el de la construcción y el del metal, y ha llamado a negociar y a alcanzar cuanto antes un convenio de cáracter estatal para las personas trabajadoras del campo. La dignificación del sector pasa, necesariamente, por que el sector agrario cuente de una vez por todas con un convenio de ámbito estatal que hasta ahora no ha sido posible, a pesar de los esfuerzos de la Federación. A este respecto ha criticado que los empresarios del sector han venido demostrando una alarmante falta de predisposición a la negociación y todos los intentos encaminados a desarrollar un marco estatal no han prosperado hasta el momento, aunque en ese ámbito se han alcanzado acuerdos como el protocolo a aplicar en casos de olas de calor, o el protocolo de prevención en situaciones de acoso.