El secretario general de UGT FICA País Valenciano, que clausuró el 6º Congreso de la EFFAT que se ha venido celebrando en Valencia, reclama la unidad de los sindicatos frente al avance de la ultraderecha
El 6º Congreso de la Federación Europea de Trabajadores y Trabajadoras de la Alimentación, la Agricultura y el Turismo (EFFAT) se cerró ayer con un llamamiento a la unidad de los sindicatos y de los partidos de izquierda de todo el mundo para hacer frente al avance de las políticas del neoliberalismo y de la ultraderecha, entre cuyos principios figura la negación del cambio climático, principal causa, aunque no la única, de la DANA que asoló la Comunidad Valenciana, Castilla La Mancha, Andalucía y Murcia el mes pasado. "El cambio climático ha golpeado estas tierras, pero el clima no entiende de fronteras y mañana puede ser cualquier otro país el que sufra sus consecuencias. Los sindicatos hemos de concienciar y potenciar las políticas necesarias con las que afrontar esta crisis", consideró.
Daniel Argente criticó duramente durante su intervención las nefastas medidas políticas adoptadas por el gobierno de la Generalitat, apoyado en la ultraderecha, así como la pésima gestión de la catástrofe, que podían haber evitado muchas muertes si no se hubieran tomado medidas como la de eliminar la unidad de emergencias e invertir ese partida en fomentar las corridas de toros, que fue una de las primeras medidas tomadas por el gobierno de la Generalitat.
Con esta referencia, el secretario general de UGT FICA PV llamó al conjunto del movimiento sindical y a los partidos de izquierda a apartar sus diferencias y hacer una apuesta en común para enfrentar los retos de un futuro marcado por el cambio climático y la transformación de la economía. La unidad de los sindicatos es necesaria para encauzar con éxito este gran proceso de transformación que suponen la digitalización y la descarbonización de la economía, que traerán aparejadas profundas modificaciones en el ámbito laboral en todos los sectores económicos, incluido el agroalimentario.
A este respecto, consideró que es importante poner todos los medios para que no se quede nadie atrás en ese proceso, y conseguir convertirlo en una oportunidad para atraer a nueva fuerza laboral, con la creación de puestos de trabajo con un alto componente técnico y con buenas condiciones laborales.
Recordó que el sector agroalimentario está implantado principalmente en zonas rurales, por lo que las oportunidades de desarrollo que representan tanto la transición ecológica, como la digital, han de colaborar necesariamente a combatir la despoblación.
Además, insistió en dotarnos de una auténtica política industrial europea y coordinar las políticas entre los países para abordar aspectos básicos como la innovación, el acceso a la financiación, la cualificación de las personas trabajadoras, etc.
Daniel Argente subrató que el papel de los sindicatos es clave en ese proceso para que los cambios repercutan positivamente en los intereses de nuestros y nuestras representadas sin dejar a nadie atrás. "Es necesario que EFFAT, a través de su acción sindical internacional, siga creciendo para adquirir mayor fuerza y, con ello, ejercer mayor presión en Bruselas para hacer oír nuestras propuestas de cara a una estrategia de crecimiento que genere empleo de calidad y con derechos a través del diálogo social europeo", aseguró.